SENTIMIENTO PRIMITIVO...

Desde hace algunas semanas ( por no decir mucho más tiempo ) abundan en las webs y blogs especializados, los ecos de algunos de los tristes sucesos ocurridos en el lejano Himalaya, y que bajo el amplio cobijo de la palabra Alpinismo, llenan de información ( a mi entender más alejada de la esencia de la roca y del sentimiento de las montañas o incluso del mero aspecto deportivo ) alegrando las páginas de foros y de webs, con textos y entrevistas que nos recuerdan más a cualquier plató de TV con los tertulianos estridentes de turno...
( desde las peleas, hacha en mano, en el CB en el Kanchenjunga , los "dimes y diretes" de Juanito sobe Edurne, la triste conclusión por gran parte del colectivo expedicionario y alpinistico, de que la Sur del Everest es un circo, o la noticia sobre la posibilidad de que la escalada sea incluída en los Juegos Olímpicos, allá por el 2.020.. ) en lugar de invitarnos a disfrutar y descubrir nuevos rincones, con las ascensiones y expediciones de algunos de los mejores alpinistas y montañeros.

Reflexíono en voz alta y de forma espontánea sobre esto, porque ya estamos en pleno verano, a las puertas de que muchos de nosotros iniciemos nuestro particular peregrinaje anual, en busca de todos aquellos sentimientos que la montaña, la roca, las grandes paredes, en los inicios de está hermosa actividad, nos ofrecían ( y nos ofrecen ) y pienso que en ciertos momentos hemos pérdido ese rumbo, esa dirección, ese olfato que nos conduce hacia un lugar más íntimo, más en contacto con nuestras energías más primitivas.

Desde luego, mi forma de sentir la montaña, de acercarme a la roca, es otra muy diferente y alejada de lo deportivo ( lo cual por otra parte, respeto, e incluso en ocasiones, lo disfruto, pero sé que no es lo mío.)

Mi esencia es de las que echa de menos el dormir bajo el manto de las estrellas, soy de los que se emociona al llegar a una cima y sentir el latido de todos aquellos valles bajo los pies, de los que se recrea al notar el calor del calcáreo cuando te agarras con fuerza de una de sus presas, de los que podría pasar días en la cima de una montaña sin más compañía que la del viento y las nubes, de los que se conmueve y emociona al recordar aquél vivac la noche antes de hacer la Cresta de Alba, aquella puesta de sol en el antiguo refugio de Brecha Peytía, de la hermosa sensación de presente y de fuerza interior en la cresta Jean Arlaud-Gourgs-Blancs- Clarabide ..

Quizás, viendo estas imágenes, podáis entender mejor a que me refiero, y ojalá, este verano, para muchos de vosotros-as, abunden esos momentos llenos de PRESENTE... de emociones innombrables, de sentimientos de las montaña en su estado más puro y genuino.
Estar atentos y no los dejéis escapar...!!!

Disfrutar de vuestros caminos y nos vemos en las montañas.. !!!