23 de marzo de 2021

TIEMPOS MODERNOS...

 Tiempo de silencios, de reflexiones, de pararnos un momento, mirar a nuestro alrededor, de respirar...

De un tiempo a esta parte, me sorprendo al observar como seguimos cayendo en la tentación (y en la ostentación) de pensar (y divulgar a los 4 vientos, y a ser posible en un tono elevado de voz) que el ciclismo y las bicicletas (en cualquiera de sus variantes), son lo mejor que uno puede encontrar en la vida (después de una buena sidra bretona, la crema de cacahuete, e incluso, en ocasiones, mejor que el sexo). 

Y añado en el mismo "paquete" de actividades sin las que parece que de un tiempo a ésta parte no podemos vivir, todas aquellas que ocurren en un entorno privilegiado, ilimitado y tan energético como son los bosques y las montañas. (Unos nos sentiremos más cerca de las bicicletas, otros de las carreras de montaña, algunos del alpinismo, otros de la escalada, el hielo, etc...)




No sólo es lo "mejor que nos podía pasar", sino que además lo convertimos en religión. 
Y como no tenemos suficiente con ponernos etiquetas o pertenecer a algún tipo de tribu, grupo o clan, nos "sectarizamos"... Antes uno salía en bicicleta por la montaña, ahora hacemos "Muntánbike"; los que salían ha hacer footing, ahora son Homo Runners (uys..perdón... hay quién sólo corre Ultras). 
Los que subían paredes, ahora hacen "Bloque", mientras arrastran entre piedra y piedra un "colchón" en la espalda.. (perdón un "Crash Pad"...) Mucho mejor que salgan un par de fotos en tú CV, o en la presentación del TINDER, de tú último Iron Man, que la foto de la  Orla Universitaria. Las carreras de orientación se han convertido en "Rogaines", y ya no nos basta con llegar y acabar una prueba, sino que el objetivo es ser Finishers y colgarlo en las redes (o es al revés...???)



A todo este batiburrillo de nomenclaturas, en el sector bicicleteril le sumaremos algunas tendencias, tales como p.ej.: los "carreteiros", delgados, depilados hasta las cejas, maillots de diseño, gafas que tapen cuanto más rostro mejor y los PP (además de "Potencialmente Peligrosos", son Pseudo Pros que no llevan guantes y parece que les dan más puntos en el "Esbrava" sí se saltan los semáforos en rojo)... Los Beteteros, monoplato, manillares cuanto más anchos mejor, ruedas gordas y mezclando botones para que se baje el sillín en los tramos más "peligrosos"; algunos llevan cascos con visera Enduro Style... Los Graveleros, caos y anarquía, depilados, sin depilar, con manillares curvos, ruedas gordas, finas, maillots enlicrados o con camisas de cuadros (ayyssss noooo.. que estos últimos son los Bikepackers, sin prisa, bermudas tejanas y cafetera en la bolsa del manillar, cuántas más bolsas para transportar cosas por todo el cuadro de la bici, mucho mejor...); sin olvidarnos de Single Speeders; los amigos del ciclismo de pista, etc... etc...(No.. no pienso decir ni una sola palabra sobre los que montan con E-bikes...) 

Y entre todo esta maravillosa fauna biciclista, aparecen de repente y sin previo aviso, auténticos "catálogos" de dos patas y tremendo colorido 3D en movimiento, luciendo tal marca o tal otra, y ahora transformados en "Youtubers" e "Influencers", ingenuos aspirantes a enviar al palco a Zugastis y Sanjuanes; incluso alguno hay que ha pedido algún tipo de crédito personal para poder adquirir tantas Go Pro o ése Dron de última generación conectado al satélite Galileo y que te sigue durante todo el día, incluso cuando vas a miccionar...Ver para creer.. (o era al revés...???) 
 



Erich From, conocido psicólogo y filósofo humanista, escribía que cuando intentamos imitar a los que nos rodean, pasamos desapercibidos, corriendo el riesgo de transformarnos en inconformistas incapaces de rebelarnos contra lo establecido, e incluso perdiendo nuestra libertad.

El nuevo siglo en el que nos hallamos, está plagado de posibilidades de interacción, de intercomunicación masiva e invasión 2.0, de sobredosis de contenidos audiovisuales volcados en "atrayentes" y esclavizantes redes sociales altamente contaminantes que deforman la realidad, priorizando el impacto mediático, aparcando las emociones y dejando los sentimientos a un lado. 

Sin darnos cuenta nos dejamos arrastrar por el valor (discutible) de nuestros logros y hazañas, dejando de prestar atención, e incluso "despreciando", el hecho de que para algunos (todavía quedamos unos cuantos), sea más importante el divertirnos transitando sin rumbo por bosques, caminos y montañas que contra el crono; que seamos capaces de disfrutar simplemente escalando, que estando más pendiente del grado de la vía que ha hecho el de al lado; que se me erize la piel recorriendo nuevas rutas y senderos con mi bicicleta, que pedalear obsesionado con los vatios de potencia que he generado...
Cómo hemos podido olvidar con tanta facilidad, que la distancia más corta entre dos personas es la risa...???


Tomarnos tan en serio a la hora de practicar este tipo de actividades, ahoga sentimientos, entierra la espontaneidad y aquella frescura con la que comenzamos a dar nuestros primeros pasos, nuestras primeras pedaladas, aquellas primeras rutas en bici con nuestros amigos, aquellas primeras flechas.

Finaliza otro Invierno. La Primavera ya está llamando a las puertas de nuestras casas. 
Quizás sea éste un buen momento para pararnos, y más con lo que nos está tocando convivir; para sentir como respira nuestro corazón y como laten nuestros pulmones, para olfatear nuestra piel y la de bosques y montañas, para mirar a nuestro alrededor y disfrutar con la llegada de nuevos aromas y nuevos colores, que a buen seguro llegarán acompañados de nuevos retos y proyectos con los que ponernos a prueba, seguir descubriendo, aprendiendo, creciendo. Pero sobre todo, intentemos no olvidar nuestra capacidad de disfrutar y de pasar buenos ratos  con los amigos...

Sed felices...!!! Nos vemos en las montañas...!!!



17 de marzo de 2021

RE-CONECTAR

 "Usted y yo no vemos las cosas como son. Vemos las cosas como somos."

(Henry Ward Beecher)

...una de las ventajas de ver las cosas como somos, es que nos permite encontrar la forma de conectar con nosotros mismos.

Nuestro yo interior puede ser muy potente si le prestamos la atención adecuada, si conseguimos alejar y "aparcar" por un rato, esas "miles de tareas" tan "importantes" que camuflan y esconden la voz de nuestra propia sabiduría, tan "amortiguada " y silenciada en éstos últimos tiempos algo más convulsos que de costumbre.
Cuando nos escuchamos a nosotros mismos, o cuando nos vemos, podemos conocer mejor, qué es aquello que nos re-conecta. Cada uno tenemos nuestra propia fórmula, nuestra llave secreta que abre la puerta a ése otro espacio o lugar de autoescucha y autoexploración donde buscamos refugio cuando algo nos preocupa, nos sentimos inquietos o agitados, y donde todo se detiene, aunque tan solo sea por unos instantes.

Y cada día más, me cuesta volver de ese lugar...





Pero también al escuchar esas pequeñas y fugaces señales que nos envía el Universo de tanto en tanto, que me llegan de forma inesperada como cuando suena el Furin que tengo colgado en el umbral de la puerta; uno no puede quedarse impasible ante esa señal o ese instante de vida que se abre ante nuestros ojos, y que reclama nuestra atención.

En contra de lo que haríamos, tal vez no haga falta alzar la vista para mirar el paisaje que nos rodea, o buscar con la mirada el horizonte y esos cielos azules que nos invitan a soñar y escapar hacía espacios o rincones donde "sentirnos libres"; quizás tan sólo necesitamos ver como somos, algo que en ocasiones puede parecernos "aterrador", pero para ello, nada mejor que cerrar los ojos e invertir nuestra mirada y que viaje hacía dentro, hacía nuestro interior.




Éste último año un tanto extraño y "diferente", me ha ofrecido la oportunidad de mirar más hacia dentro, y no tanto hacía fuera, de apagar el ruido del exterior para volver a escuchar el ritmo interior, ha vuelto a abrirme las puertas de esos reinos y esos rincones casi mágicos, en los que uno se siente seguro, esos espacios en los que uno escucha su verdadera voz, y en donde, casi sin darnos cuenta, nos sentimos conectados con nosotros mismos, y a la vez conectados con el resto de la Naturaleza, que a su vez está conectada con el resto del Universo.... Somos un TODO y TODO está interconectado.

...una de las ventajas de ver las cosas como somos, es que nos permite encontrar la forma de conectar con nosotros mismos, y con el resto de Universo...



PD.- Hoy hace un año de mi última publicación en éste blog. Creo que echaba de menos volver a escribir.